Esta es la historia de un pequeño apartamento en Ourense, justo entre la parte antigua y la parte nueva de la ciudad, en una pequeña área arbolada y tranquila a un paso de los vinos y del paseo.
El apartamento tenía todo lo que sus amos necesitaban a la vuelta de la esquina: supermercados, fruterías, carnicería, estanco, peluquería, veterinario, restaurantes, bares...
Y árboles, muchos árboles.